sábado, 24 de septiembre de 2011

El 50 aniversario desde la experiencia de Ana Clara

Desde nuestro blog agradecemos a Ana Clara (a la que seguro que conocéis por las muchas veces que nos ha hecho disfrutar con su voz y su canto en el Santuario) que haya querido compartir con todos nosotros sus fotos y sobre todo lo que vivió el pasado 21 de septiembre, fiesta de la virgen del Brezo y 50 aniversario de su coronación.

Desde aquí queda abierta también la invitación a todos los que seguís este blog y que también estuvisteis aquel día en el Brezo a que compartáis vuestras fotos y vuestra experiencia de la romería de San Mateo de este año.
"Como muchos otros peregrinos, no he faltado ningún año, es un lugar que me enamoró desde que fui por primera vez de paseo y sin duda fue la Virgen del Brezo que me llevó de su mano hasta allí. Mi primera visita al santuario fue en junio o julio del 2002, ese día conocí a Don Jesús y me invitó a cantar en la Romería del Emigrante y gustó tanto el gesto de cantarle a la Virgen una Salve, que me volvió a invitar para la Romería Mayor. El año que viene cumpliré 10 años que voy a la Romería. Y cantarle en lo que para mí es una ofrenda de parte de todos los peregrinos, es algo que aún me emociona!"


"San Mateo ha sido un día espléndido!! En todos los sentidos... Cuánta gente! Todo bien organizado, muchos jóvenes colaborando, identificados con camisetas de la Virgen del Brezo (fueron un éxito! las pedía todo el mundo para comprarlas!), un día de confraternización con gente de otras cofradías, las Vírgenes que nos acompañaron, la compañía del Obispo que nos acompañó hasta el rezo del rosario, todos los sacerdotes que concelebraron, la música (espero que haya gustado! yo la verdad me sentí más cómoda para cantar el Himno, teniendo el acompañamiento del organista, Don Andrés, que realzó más el Himno si cabe. Con Raúl (el sacerdote que ayudó a dirigir la música) nos entendimos muy bien para cantarlo, se lo enseñé antes de la misa y lo aprendió muy rápido! El coro, que tenía las canciones preparadas. Luego del rosario, también se cantó en el Santuario para acompañar a todos los peregrinos que besaban el medallón de la Virgen."



"Me encantó que estuviera la Virgen del Mar también, no había visto nunca su talla, es preciosa! Igual se podría llevar cada 21 de septiembre y colocarla en su capilla para que la gente la vea, como una peregrina más del Brezo que es. No se, es una idea que se me acaba de ocurrir. Igual es que otros años ha estado y no la he visto."

"Fue un día hermoso, además de que el tiempo nos acompañó, la gente respondió con su presencia y su silencio durante toda la misa. Fue una de las Romerías más bonitas de todas las que he ido!"



miércoles, 21 de septiembre de 2011

21 de Septiembre, Romería Mayor

En este 21 de septiembre, fiesta de San Mateo, romería mayor de Nuestra Señora del Brezo, nos unimos a todos amigos del Brezo que como cada año se congregarán en torno a la Virgen del Brezo.


Santa María de Nazaret,
Virgen Madre del Señor:
volvemos nuestros ojos a ti
lo que te llamamos
VIRGEN DEL BREZO

Enséñanos cada día a hacer
la voluntad de Dios
y a recibir a nuestro corazón
la Vida y la Palabra de 
Jesucristo.


Ayúdanos en nuestras 
necesidades
Haz con tu presencia 
y tu plegaria
que seamos hijos para Dios
y hermanos para los hombres.

Enséñanos a rezar y a servir
Y Ruega por nosotros, 
Madre Buena,
ahora y en la hora 
de nuestra muerte.
AMÉN



lunes, 19 de septiembre de 2011

El aire huele a promesa


El aire huele a promesa,
a retama y a romero,
por el camino que sube
hasta la Virgen del Brezo.

Huele a buenas intenciones,
a fe y arrepentimiento,
a ruegos, a veces a súplicas,
y sentimientos sinceros.


A quien respira este aroma
se le va llenando el pecho
de un nuevo estado de gracia
que en el alma halla su centro


Es difícil de explicar,
hay que sentirlo, no verlo.
hay que venir, hay que estar
junto a la Virgen del Brezo.


Cofrades y peregrinos,
paisanos y forasteros,
que aquí han llegado ya saben
lo que hay detrás de estos versos:

Humildad ante el milagro,
nada más, tan sólo eso:
humildad ante el milagro,
nunca fue ningún secreto.

J.C.S. - 2011

domingo, 18 de septiembre de 2011

El Brezo desde el corazón


La devoción a la Virgen del Brezo, en muchas personas, tiene su vinculación a la familia y a la niñez: “La devoción a la Virgen del Brezo nació y creció en mí desde mis padres, los abuelos…”, “Siempre me llamó la atención esas miradas de nuestros mayores fijas en la imagen de la Virgen...” “En mi familia siempre ha habido mucha devoción a la Virgen…”, “Ya de mi infancia guardo gratos recuerdos de los preparativos para el día de “San Mateo”, la subida de la Virgen desde Villafría…”, “No puedo olvidar los campamentos que organizaba D. Jesús parra los chavales que nos ayudaron a estrechar lazos de amistad…”, “ En muchos momentos de mi vida recuerdo con nostalgia la subida de la Virgen, la salida desde Villafría, donde los mozos portaban la imagen hasta la ermita de S. José, lugar donde comenzaba el Vía Crucis, tomando el relevo  los peregrinos llegados desde muchos puntos de Palencia, Valladolid, León, Burgos ó Cantabria”, “Estoy orgullosa de haber nacido y crecido en una familia con devoción y fe a la virgen del Brezo…”.

     Pero la devoción a la Virgen del Brezo, no se ha quedado en recuerdos de infancia, “Ella ha sido referente en momentos importantes de mi vida…en las situaciones difíciles y en las alegres y festivas”, “la confianza en Ella me ha ayudado a superar experiencias dolorosas…el Brezo es un lugar especial, ya que allí siento una paz interior difícil de explicar”, “Desde la Liébana, no podemos faltar a la cita con la Virgen del Brezo el 21 de Septiembre y algún domingo del verano porque ha marcado mucho nuestras vidas”, “De pequeña me emocionaba cuando oía cantar la salve, y ahora de mayor sigo emocionándome igual por todo lo que se expresa de sentimiento en ese momento”, “Aunque en  algunas dificultades de la vida me he revelado,  puedo asegurar que me he sentido recompensada con creces”.

     Ilusiones, ternura, fe, hermandad, esperanza….son deseos  que pervivan en torno a la figura de la Virgen, como Señora del Brezo, mantenidos durante tantos años por tantas personas que pasaron dejando su huella y quienes venimos detrás tendremos que dejar a las generaciones venideras.

Artículo realizado con aportaciones de cofrades y devotos de la Virgen del Brezo 

sábado, 17 de septiembre de 2011

A los 50 años de la coronación


Qué alegría me inundó, cuando al comenzar este año 2011, Don Andrés, Capellán de la Virgen del Brezo, me mandó repartir, por los pueblos donde tenía que celebrar la Eucaristía, los carteles que recordaban el 50 aniversario de la Coronación  en el año 1961! Y de repente, como seguro os ha pasado a todos vosotros, me vinieron infinidad de recuerdos personales, familiares, de amigos, encuentros con quienes compartíamos la misma ilusión y la misma fe, al abrigo de estas montañas del Brezo que custodian, como castillos, a nuestra Virgen; pero que la dejan una mirada hacia el horizonte, para hacerse compañera  de nuestros caminos, más felices o menos.

¡Han sido cincuenta años! Una vida, unas vidas, de los que aún vivimos y de tantos que murieron, pero que nos dejaron el testigo de su amor hondo a María en nuestros corazones. Os invito también a vosotros, con estas pobres letras, salidas del cariño profundo a esta tierra y a cuantos de otros lugares, provincias o regiones sentís la misma devoción por la Virgen del Brezo, hagáis memoria agradecida a los dones que María, nos ha dado a lo largo de nuestra vida. Dejad que el recuerdo evoque en vosotros lo mejor.

He leído que las condiciones para que la Iglesia, los devotos, los cofrades, puedan proponer  la coronación de una Virgen al Papa, son estas dos: una imagen de valor espiritual e histórico-artístico, y una devoción acreditada a la Madre de Dios en la zona. Y justo cuadra a  nuestra querida Virgen del Brezo: La imagen “ la asombrosa imagen” románico-gótica, síntesis artística y también histórica; la devoción comienza cuando en el siglo XIII, llega la imagen a Villafría, y desde entonces comienza la riada de peregrinos al Brezo y, con algunos olvidos históricos, llega hasta hoy.

Todos, desde niños, jóvenes, o mayores hemos hecho el camino al Brezo andando, descalzos, antiguamente en caballerías, hoy en coche, es igual, los sentimientos, las vivencias de fe han sido las mismas: ya desde la salida del sol estábamos pensando en el Brezo, los nervios, preparar la comida, y en camino en grupo…llegar a Villafría y comenzar el ascenso…el corazón latía rápido, por la emoción y el esfuerzo; de pronto, junto a la ermita de San José, entramos en el desfiladero que nos abre al santuario. La tierra que pisamos es sagrada, las montañas a un lado y a otro nos hablan de Dios, el aire puro que respiramos contrasta con nuestra pequeñez interior, nuestro pecado. Y llegamos al pequeño oasis del Brezo, las campanas de la espadaña despiertan en nosotros tranquilidad, gozo y paz, presencia de María y reencuentro con la misericordia de Dios Padre en Sacramento de la Reconciliación, ¡cuántas veces y cuánto arrepentimiento y promesa! Y después, con la presencia de la Virgen en las andas, participar juntos, bien en el Santuario, o esparcidos por las montañas, de la celebración de la Eucaristía, resplandor de luz, de silencio, contemplación y escucha, de manos entrelazadas. Llenos de peticiones por todos - los que estábamos allí, los que no pudieron venir que nos encargaron rezar a María, por todas las necesidades espirituales y materiales de la zona- de promesas cumplidas y las nuevas…. Y después saludar a la familia que hacía tiempo no veíamos, a los conocidos, hacer nuevas amistades y compartir la comida especial de los días especiales de romería. Despedirnos de María, reina de nuestros corazones y de nuestra vida, cantando emocionadamente la SALVE; y reemprender el regreso a nuestras casas, a nuestras tareas, pero renovados, con deseos de vivir el aire puro de la montaña del Brezo en la dificultad del trabajo cotidiano, más monótono, pero no menos presencia de Dios, de María.                             
       
En verdad es una historia digna de ser contada, pero sobre todo digna de ser vivida. Y en estos tiempos que corren quizá, lo que de niños vivimos, es lo que más y mejor recordamos. Es momento de volver, de seguir abriendo tiempos, espacios religiosos, cristianos en nuestra vida, tocada en este comienzo del siglo XXI, de superficialidad, de intereses materiales, poco abierta a lo profundo, que nos deja una amargura interna, porque falta a las cosas el corazón, el centro sobre el que asentar nuestra vida; en definitiva lo que nos da, nos daba el Brezo, María. A los cincuenta años de la coronación se nos pide, en tiempos de crisis humana, cambiar, o volver quizá al pasado, para buscar en estas raíces la razón de la existencia.

Junto a este reto primero, se me ocurren algunos más, quizá también a vosotros, devotos y cofrades, de la Virgen del Brezo; la meta está alta, como la montaña que cobija a nuestra Virgen. Algo que me preocupa, quizá también a vosotros: ¿cómo trasmitir estas convicciones a las generaciones futuras?  Yo no tengo la respuesta, pero es tiempo de plantearlo y de ayudarnos, contar experiencias positivas, que las hay, y aprender para el futuro. Sería una de las mejores ofrendas ante el altar del Brezo. En este año del 50 aniversario, procuremos que los niños, adolescentes, jóvenes, familias participen en algún momento de esta experiencia. Así tanto devotos, cofrades, padres, abuelos, jóvenes, religiosos, religiosas, sacerdotes trabajemos por hacer más conocida nuestra devoción al Brezo, en cualquier región, provincia donde vivamos.

Amigos, devotos, cofrades, que sea este 2011 un año de bendición, de presencia de María en nuestra vida. En la contraportada tenéis la oración acostumbrada a la Virgen del Brezo- que nos dejó el Don Jesús, el anterior capellán-  no vale sólo recitarla, es para pensarla, hacerla nuestra, en  la mente, en el corazón, en la vida…¡Feliz 50 aniversario! 

D. José González Rabanal

Horario de la fiesta de la Virgen del Brezo 2011